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Fichas de plantas

Consulta las características y cuidados de las plantas ornamentales

Temperatura media o alta
Sombra ligera
Sustrato ácido, rico y suelto
Riego moderado
Hoja perenne
UNA LIANA DEL SUDESTE ASIÁTICO
El Scindapsus pictus es una especie perteneciente a la extensa familia de las Aráceas, como los filodendros, alocasias y anturios, entre tantas otras que se cultivan dentro de casa. Tal vez por ello se la llama filodendro plateado, aunque es un error ya que pertenece a un género distinto. En su hábitat natural, las junglas del Sudeste asiático, desde Bangladesh y Tailandia a Malaisia, Borneo, Java, Sumatra, Sulawesi y las Filipinas, puede alcanzar los tres metros de largo y emitir pequeñas flores (espádices envueltos en una espata), lo que en el cultivo en interiores solo se produce de forma excepcional. El cultivar ‘Argyraeus’ (en la foto), el más habitual en los centros de jardinería, cuenta con el Award of Garden Merit de la Royal Horticultural Society.
Plantas de interior

Scindapsus pictus

Poto plateado, Poto satén

Descripción

Sus hojas de color verde oscuro con máculas y finos márgenes plateados han convertido al Scindapsus pictus en un gran competidor de los potos habituales, Epipremnum pinnatum y Epipremnum aureum. El llamado poto plateado o poto satén, por su tacto suave y afelpado, también es una liana de fácil cultivo, que puede lucir en un tiesto colgante, enredada en una estaca recubierta de musgo, o en una macetita en cualquier rincón luminoso dentro de casa. Se desarrolla mucho más lentamente que los otros potos, y también contribuye a purificar el ambiente.

Hojas

Las hojas son perennes, ovaladas y acabadas en punta, como las de todos los potos, aunque en su caso, además de aterciopeladas, son también más gruesas y, por lo tanto, más rígidas. Suelen tener entre cinco y siete centímetros de largo, aunque pueden ser más grandes. El específico pictus alude a las manchas plateadas que parecen pintadas en el haz de las hojas. Existen variedades con una mayor profusión de tachas. El envés es siempre de color verde claro.

Cultivo

Se debe situar en un lugar luminoso, pero a resguardo del sol directo, que quema las hojas. Precisa un sustrato rico, ácido, suelto y con buen drenaje para que el agua no se encharque. La temperatura ideal es entre 18 y 25°; empieza a sufrir cuando baja de 15°. Se reproduce fácilmente por acodos en la misma maceta, lo que favorece un aspecto más denso, o esquejes. Cada dos o tres primaveras conviene cambiarlo de tiesto para renovarle el sustrato.

Cuidados

Desde la primavera al otoño se debe regar de forma moderada, dejando que la capa superior del sustrato se seque entremedias; en invierno es mejor no regarlo. Si aparecen manchas o amarilleamiento en las hojas significa exceso de riego; si se enroscan hacia abajo, falta de agua. Agradecerá las pulverizaciones frecuentes con agua libre de cal, sobre todo en verano. En el periodo de crecimiento vegetativo necesitará abono para plantas verdes cada 15 días; el resto del año, una vez al mes. Los tallos demasiado largos se deben recortar (mejor si es en primavera) para conseguir una mata más compacta. En el envés de las hojas pueden aparecer las conchillas marrones de la cochinilla cerosa; deben ser retiradas (preferentemente a mano) puesto que restan vigor a la planta y segregan una sustancia melosa.

Foto: iStock