Verde es Vida nº91

52 verdeesvida encima de ellas para abrigar la corona de yemas que brotarán en primavera; otras necesitan que se arranquen del empla- zamiento y se guar- den en un cobertizo o garaje hasta que pase el periodo más crudo del invierno, aunque siempre es preferible usar otras mejor adaptadas a nuestro entorno. En la mayoría de TÉCNICAS que puede arruinar la plantación con gran facilidad. Si se ha preparado bien el suelo en pro- fundidad, los riegos han de ser largos para humedecer hasta las capas más profundas del suelo, y distanciados lo máximo posible en el tiempo, para educar a las plantas a enraizar en pro- fundidad y hacerlas más resistentes a la sequía estival. Un año de vivaces • Otoño: El otoño es un tiempo de tran- sición, en el que en nuestro entorno se da la circunstancia de que crecen plan- tas cuya dormición o reposo ocurre en invierno, y otras que es en verano. Las tres labores principales, y perma- nentes, en el mante- nimiento de vivaces son la limpieza de partes muertas o marchitas; el riego, que varía en función de la época y del tipo y madurez de la planta, y la escarda, que ha de ser una constante. En el otoño suelen brotar malas hierbas anua- les como pamplinas (Stellaria media), cerrajas (Sonchus sp.), lapas (Galium aparine), etcétera, aunque las más tenaces son las de primavera y verano, sobre todo vivaces como la grama (Cynodon dactylon), juncia (Cyperus rotundus), corre- huela (Convolvulus arvensis), un grupo Las plantas vivaces o herbáceas perennes, ricas en colores y formas, componen un grupo sumamente heterogéneo, capaz de satisfacer un gran número de requerimientos y solucionar infinidad de situaciones. Una vez realizada la plantación, su mantenimiento variará según sus características y grado de madurez. El mantenimiento de las vivaces a lo largo del año Texto_ Gilberto Segovia, conservador en jardines históricos de Madrid Así, podemos tener algunas terminan- do su ciclo anual, como los Helenium, Paeonia herbáceas o Solidago, junto a otras, como las Alcea, Acanthus o Cynara, que comien- zan a brotar o lo han hecho al final del verano. Es necesario por lo tanto tener en cuenta los diferentes ritmos que suenan en nuestro jardín. Una de las principa- les tareas de otoño es la poda de toda la parte aérea de muchas vivaces, por estética y por facilitar las labores. Sin embargo, algu- nas inflorescencias poseen un atractivo fantástico, aunque estén secas, como el Sedum spec- tabile y muchas gramíneas, y se dejan para adornar el macizo hasta la primavera, cuando serán podadas. Otra parte importan- te del mantenimien- to en esta época es la necesidad de hacer preparativos para el frío que viene. Algunas plantas salen bene- ficiadas de un acol- chado o de dejar su vegetación muerta Fotos: Gap Gardens CUIDADO los casos (principal- mente en zonas de clima mediterráneo), el otoño, e incluso el invierno, es la mejor época para  Una de las tareas típicas del otoño es la poda al ras de la parte aérea de las vivaces que ya se han secado, aunque hay excepciones. Principales problemas sanitarios En invierno, algunas plantas, como las malvas, alceas y varias gramí- neas ornamentales, entre otras, pueden infectarse con roya, un hongo que aparece sobre todo en condiciones de alta humedad y poca airea- ción de las matas. Para solucionarlo se puede tratar con decocciones de cola de caballo (Equisetum arvense), mediante hilos de cobre enrollados en los tallos, o podar la vegetación contaminada con el fin de airear la zona. Desde la primavera al otoño, con relativa frecuencia se producirán casos de ataques de pulgones y oídio. Los pulgones se controlan fácilmente mediante pulverizaciones de jabón potásico; el oídio, con cola de caballo, o agua mezclada con un 10% de leche.

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