Descripción
El color de sus flores en contraste con el verde o el rojizo de sus hojas, más resistentes a los rayos del sol, caracterizan a esta alegría originaria de Nueva Guinea. Es una balsaminácea, hermana de la alegría del hogar (Impatiens walleriana) y pariente del bálsamo (I. balsamina).
Hojas
Verdes, rojizas e incluso variegadas, en tonos amarillos y verdes con nervaduras rosadas, el follaje de la Impatiens hawkeri es denso y compacto.
Flores
Blanco, levemente rosado, rosa, salmón, coral, rojo, magenta: sus flores pueden ser tanto de suaves como de vibrantes colores. Consisten en una hilera de unos diez pétalos, rematada por un delgado espolón. Florece desde el verano al otoño.
Cultivo
Se pueden cultivar con facilidad en el interior y el exterior. Necesitan entre 13 y 23º de temperatura, humedad ambiente, mucha luz, y toleran bien el sol directo (una orientación al este es ideal) en las regiones más cálidas. Prefieren un suelo rico en materia orgánica, pero bien drenado. Según el clima se comporta como una planta perenne o anual, y puede brindar flores todo el año.
Cuidados
Necesitan que la tierra se mantenga siempre húmeda, pero no toleran el encharcamiento, que favorece la podredumbre de los tallos. Precisan riegos diarios en verano y escasos en invierno; no se deben mojar las flores. La sequedad provoca la caída de las hojas y la aparición de la araña roja y la mosca blanca.
De interés
En jardines, patios y porches, la alegría guineana da mucho juego cromático en tiestos, borduras, rocallas, macizos y jardineras colgantes...