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Fichas de plantas

Consulta las características y cuidados de las plantas ornamentales

Zonas 8-10: soporta hasta -12º
Pleno sol
De riqueza media, fresco, bien drenado
Riego regular moderado
Follaje perenne
Flor: mayo-junio
Frutos comestibles en noviembre-diciembre
UN FRUTO QUE SABE A GUAYABA Y PIÑA
Los aromáticos frutos que produce la feijoa son muy apreciados por el sabor tropical a guayaba, piña y menta de su carne acidulada y jugosa. Son bayas ovoides de unos 4-7 cm de largo y 3-5 cm de diámetro, con el cáliz bien visible, la piel verde y el interior blanco amarillento; contienen entre 20 y 40 semillas. Son ricos sobre todo en vitamina C y se consumen crudos o en mermeladas, compotas, helados y bebidas. Solo maduran en las regiones donde las temperaturas no bajan de 5°. Existen numerosos cultivares destinados a la producción de fruta, muchos de los cuales exigen polinización cruzada para ofrecer una buena fructificación, por lo que se deben plantar al menos dos diferentes o una variedad autofértil. Los frutos en su punto óptimo de madurez se recogen del suelo. También las flores son comestibles y se suelen consumir en ensaladas.
Árboles y palmeras

Acca sellowiana

Feijoa, Falso guayabo, Guayabo del Brasil

Descripción

La feijoa es un pequeño árbol o arbusto grande perennifolio de origen sudamericano que se presta a formar parte tanto de una huerta por el interés de sus frutos, como de un jardín por sus vistosas flores y su frondoso follaje verde. Se puede usar como ejemplar aislado o en grupos, pero también en setos y medianas por su buena respuesta a la poda y su lento crecimiento. Suele alcanzar entre uno y cinco metros de altura, aunque hay ejemplares mucho más altos, como los que se ven en San Andrés de Teixido, Galicia. Prefiere los climas templados, con inviernos frescos y veranos no muy calientes, y soporta la sequía una vez establecida, así como los ambientes salinos. Es especialmente resisente a las plagas y hongos y se considera de bajo mantenimiento.

Estructura y follaje

La ramificación es abundante y el follaje espeso, formado por pequeñas hojas elípticas, de 3-6 cm de largo, coriáceas, con el haz brillante y el envés afelpado y blanquecino. La feijoa se puede podar en forma de árbol dejando a la vista uno o varios troncos, o dejarla crecer a su aire, ramificada desde la base.

Flores

Un mechón de estambres rojos de unos tres centímetros de largo con anteras amarillas destaca en las flores, formadas por cuatro pétalos carnosos curvados hacia arriba, que apenas dejan ver el color rosa vivo del haz en contraste con el rosa claro casi blanco del envés. La floración se escalona a lo largo de 20-30 días. Abejas, abejorros y mariposas se encargan de la polinización.

Cultivo y cuidados

Se debe situar a pleno sol, en un sitio resguardado del viento. El sustrato ha de ser de riqueza media, bien drenado pero capaz de retener cierto grado de humedad, y preferentemente neutro o ácido. Precisa riegos regulares, mejor si son profundos, sobre todo si se desea una buena frutificación, aunque puede soportar largos periodos de sequía una vez establecida. Sus raíces son superficiales y conviene acolchar la base para protegerlas. En las feijoas para producción de frutos, la poda, si fuera necesaria, debe efectuarse después de la fructificación.

Usos

En solitario, formando grupos o en setos y medianas, aunque en este caso puede dar menos flores y por lo tanto pocos frutos debido a los recortes.

Foto: Ecos de Pedra